La fragilidad de las familias en tiempos de Pandemia
Sin dudas una de las organizaciones civiles más creíbles y serias a nivel mundial es UNICEF, y cuando se habla de infancia, familia y sectores vulnerables, seguramente es la institución que mas sabe. Por eso el último informe de UNICEF Argentina debe ser leído, analizado y sobre todo tomado como una herramienta para combatir eficazmente la desigualdad que afecta a millones de niños y sus familias.
Por tercera vez en el año, la entidad que encabeza Luisa Brumana (foto) en nuestro país realizó una encuesta de alcance nacional referida al impacto de la pandemia de Covid-19.
Nadie podría esperar datos positivos o al menos información de un contexto preocupante, pero el informe de 73 páginas denominado Impacto de la Pandemia Covid 19 en las familias con niñas, niños y adolescentes, debe ser tenido muy en cuenta por quienes hoy toman decisiones a nivel social y político. (ver informe completo).
Si intención de simplificar este informe, se puede señalar a modo inicial que la crisis económica que impacta principalmente en la pulverización del empleo, es el indicador más claro.
4 de cada 10 hogares con niños y niñas, hoy está sin adultos laboralmente activos. En contrapartida, esta situación genera un efecto totalmente negativo: son los adolescentes y niños que en muchos casos son quienes deben incorporarse al trabajo, obviamente en condiciones de desigualdad. Esto se reflejó en que el 16% de los jóvenes menores de edad debió realizar actividades laborales en Pandemia.
La disminución en los ingresos por familia, la sobrecarga de tareas de las mujeres en casa a causa de la prolongada cuarentena y las dificultades en el acceso a servicios de salud dadas las restricciones sanitarias. Básicamente, la Pandemia generó un combo perfecto que acrecentó la brecha y golpeó directamente a los más vulnerables.
Vale mencionar que esta encuesta, ya se había realizado en contexto de Pandemia en los meses de abril y julio de este año.
Vulnerables
Entre los datos que preocupan se puede mencionar que de todos los hogares con menores que enfrentan una reducción de ingresos laborales, cerca del 70 por ciento, perdió la mitad o más de la mitad de sus remuneraciones.
En cuanto al dato que refiere que cuatro de cada diez hogares sufrieron reducción de ingresos, esto equivaldría a 2,1 millones de grupos familiares con niños, niñas y adolescentes.
También se puede ver el deterioro en la calidad de vida, en que las familias debieron endeudarse para compra comida. Así casi el 36 % de las familias encuestadas debieron recurrir a créditos, o préstamos para poder alimentarse
Aquí hay que mencionar que el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) que puso en marcha el gobierno logró paliar algo de esta situación llegando a una cobertura del 42% en octubre pasado.
También la asistencia de la Tarjeta Alimentaria subió el número de beneficiarios, llegando a un 33 % de casos.
Más allá de las ayudas sociales – que lamentablemente hoy están en duda su continuidad y alcance- la encuesta puso en evidencia que existen serias deficiencias alimentarias. EL sondeo expone que un 28% de las familias encuestadas dejaron de comprar algún alimento de primera necesidad.
Merma en los recursos o ingresos económicos, precariedad laboral e incluso pérdida de trabajo, exposición de menores a condiciones laborales que no tenían antes de la pandemia, y la incertidumbre que genera no solamente la situación sanitaria sino también la económica, quedan expuestas en esta verdadera radiografía de las familias argentinas en el trascurso del 2020. Lo que depare el 2021 está en manos de todos, pero sobre todo en las ideas y las acciones que impulsen los actores políticos y sociales que protagonizaron las estrategias durante la Pandemia.
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